martes, 31 de mayo de 2016

Exclusiones y desigualdades educativas: el impacto en el inicio temprano de la trayectoria laboral


Por: Leslie Lemus Barahona, EducaGuatemala[1]

Una visión normativa de la relación entre la educación y el mundo del trabajo sugiere que en las trayectorias vitales primero debe concluirse la formación escolar para después iniciar la vida laboral. Esto no necesariamente ocurre de este modo. La propuesta presentada aquí es que es necesario tener en cuenta la posición social de las personas. De tal cuenta se analizaron las diferencias por estrato socioeconómico[2] en los patrones de ingreso al primer trabajo y de salida de la escuela[3].

Lejos de los presupuestos normativos, una primera impresión ofrece indicios de que Guatemala es un país en el que la población joven se encuentra muy lejos de ejercer la moratoria social que implica dedicarse de forma exclusiva a estudiar.


La información descriptiva muestra un patrón similar en cuanto a experiencia laboral entre estratos, dado que la proporción de quienes reportan haber trabajado alguna vez es muy similar en cada categoría. Sin embargo, el análisis de probabilidades de inicio temprano de la trayectoria laboral muestra que éstas son 26%[4] y 27%[5] mayores quienes se encuentran en los estratos bajo y medio –respectivamente- con relación a quienes se encuentran en el estrato alto. Esto se confirma al observar las edades mínimas y máximas de ingreso al primer trabajo.

Mínimos y máximos...
Estrato
Edad ingreso primer trabajo
Edad salida de la escuela
Mín.
Máx.
Mín.
Máx.
Alto
8
27
7
29
Medio
7
28
8
29
Bajo
5
29
7
29
Cuadro de texto: Mínimos y máximos…
Estrato Edad ingreso primer trabajo Edad salida de la escuela
 Mín. Máx. Mín. Máx.
Alto 8 27 7 29
Medio 7 28 8 29
Bajo 5 29 7 29


Enseguida, al observar el rango de edad en que se reporta la salida de la escuela –por finalización de estudios o deserción- podríamos pensar que estamos ante una sociedad de similares oportunidades educativas. Sin embargo esto debe matizarse pues la proporción de quienes han dejado la escuela aumenta conforme se desciende de estrato.
  

En términos generales ocurre que las probabilidades de ingresar al primer trabajo aumentan cerca de 6.19[6] veces durante los primeros dos años posteriores a la salida de la escuela respecto de quienes permanecen en ella. Estas probabilidades son 2.34[7] veces después de este período inicial de transición.[8]


Ahora bien, a diferencia del patrón general y dado que tienen un calendario más temprano de inicio de la vida laboral, pareciera que quienes se encuentran en los estratos bajos están ingresando al primer trabajo cuando aún están estudiando. Para este estrato las probabilidades de ingresar al primer trabajo se reducen cerca de 50%[9] durante los años posteriores a la salida de la escuela, lo que querría decir que han experimentado el evento antes. Esto apuntaría a la hipótesis de que el ingreso al primer trabajo estaría ocasionando deserción escolar.



En el caso de los estratos medio y alto podrían estarse produciendo dos fenómenos.El primero respondería al patrón normativo de concluir cierto ciclo de escolarización para después ingresar al primer trabajo. El segundo fenómeno, a diferencia de los estratos bajos, es que logran combinar ambas actividades. Los promedios de edad de salida de la escuela e ingreso al primer trabajo estarían apuntando a que estas hipótesis son plausibles.  




[1] El artículo está basado en los datos de la ENJU 2011 (población de 15 a 29 años de edad). El enfoque desde el que se desarrolla el argumento es el de Análisis del Curso de Vida e Historia de Eventos. Esta perspectiva plantea que las ventajas y desventajas se acumulan a lo largo de la trayectoria de vida por lo que es necesario introducir el tiempo en el análisis de los fenómenos poblacionales. El método empleado es el de Regresión Logística Binomial y requiere de la construcción de variables cambiantes en el tiempo, es decir que son resultado de combinar la ocurrencia de determinados eventos y la edad a la que los individuos lo han experimentado. El modelo desarrollado considera como variable dependiente “primer trabajo” (cambiante en el tiempo). La variable es “salida de la escuela” (cambiante en el tiempo).
[2]La variable original de la base de datos fue elaborada a partir de la metodología de clasificación socioeconómica de la European Society for Opinion and Marketing Research –ESOMAR-. Ésta considera el perfil ocupacional del jefe de hogar o el acceso a una batería de bienes y servicios. En la base de datos esta variable consta de 6 categorías –Muy alto, alto, medio alto, medio, medio bajo y bajo-. Debido a que el reducido tamaño de algunos de los grupos muestrales planteaba dificultades en las pruebas de significancia del modelo desarrollado las categorías han sido reagrupadas en  estratos Alto, Medio y Bajo.
[3] El modelo de regresión logística binomial desarrollado presenta una Pseduo R2 = 0.1190 con Prob>chi2= 0.0000.
[4]El modelo de regresión logística binomial desarrollado arroja que la razón de momios es de 1.258236 con Prob>chi2= 0.005.
[5] El modelo de regresión logística binomial desarrollado arroja que la razón de momios es de 1.273711 con Prob>chi2= 0.001.
[6] El modelo de regresión logística binomial desarrollado arroja que la razón de momios es de 6.192558 con Prob>chi2= 0.000.
[7] El modelo de regresión logística binomial desarrollado arroja que la razón de momios es de 2.343277 con Prob>chi2= 0.000.
[8] Se establece esta diferenciación pues los hallazgos empíricos de los estudios acerca de transiciones educativas parecen haber identificado que una vez transcurridos dos años es menos probable que una persona retome su trayectoria educativa, es decir que tiende a consolidarse el evento de salida de la escuela.
[9] El modelo de regresión logística binomial desarrollado arroja que la razón de momios para el período de los dos primeros años posteriores a la salida de la escuela es de .4748073 con Prob>chi2= 0.000 y de .5122483 con Prob>chi2=0.003. para el período superior a los dos años.